28 de enero – Día Internacional de la Protección de Datos Personales
La fecha del 28 de enero para conmemorar la protección de datos personales tiene su origen en el tratado del Consejo de Europa titulado “The Convention for the protection of individuals with regard to automatic processing of personal data” firmado en 1981. Este tratado ha sido ratificado en 5 ocasiones por todos los miembros del Consejo y otros estados no europeos como Uruguay y México.
Cuarenta años después están de más las explicaciones del porqué proteger los datos personales; sin embargo, es evidente que no somos aún efectivos en su procuración, y muchos somos víctimas fáciles de quienes buscan explotarlos. A continuación, algunas recomendaciones para nuestra protección:
• Respaldar nuestra información personal utilizando algún método de cifrado, y mantener una copia en otro lugar.
• Mantener un círculo real de amistades en redes sociales, es decir, asegurarnos de que todas las personas de nuestra red existan y las hayamos conocido personalmente con un apretón de manos.
• Administrar y verificar periódicamente las opciones de privacidad en todas nuestras redes sociales.
• Pensar dos veces antes de escribir cualquier cosa que comprometa nuestra información o reputación en línea. El Internet tiene muy buena memoria.
• Enseñar a nuestros hijos acerca de los riesgos del Internet. Cambiar periódicamente nuestras contraseñas de acceso.
• Nunca confiar en ligas, emails, archivos recibidos, USB drives “encontrados” aun cuando provengan de un conocido.
• Cuidar nuestros números; la información personal que contiene números es particularmente crítica, evita a toda costa publicar o enviar digitalmente tu número de cuenta del banco, tarjeta de crédito, fecha de nacimiento, Clave Única de Registro de Población (CURP), dirección postal o electrónica, número telefónico, código de alumno o empleado.
• Evita enviar fotos de tus manos o acercamientos de tu cara que permitan obtener información biométrica.
En resumen, debemos conducirnos en el ciberespacio al menos con la misma cautela y sigilo que mostramos en la vía pública.